Un primer paso importante en el proceso y tono, dice Arzobispo Gómez
Promete apoyo de obispos a sistema que proteja la dignidad humana, la patria
Plan da esperanza a millones de personas
WASHINGTON—El Arzobispo José H. Gómez de Los Ángeles, presidente del Comité sobre Migración, dio la bienvenida a los principios presentados por un grupo de ocho senadores del Congreso del país como marco para reformar el sistema migratorio de nuestra nación.
“Doy la bienvenida a la presentación del marco de trabajo bipartidista para ayudar a guiar al Congreso en una reforma migratoria,” dijo el Arzobispo Gómez el 28 de Enero. “Es un importante primer paso en el proceso y crea un tono bipartidista”.
El marco presentado por el “Grupo de los Ocho” incluye un camino a la ciudadanía para los 11 millones de indocumentados en el país. También agilizaría las reunificaciones familiares en el sistema migratorio, el cual exige a familiares esperar por años para reunirse con sus seres queridos.
“Es vital que el maco incluya un camino a la ciudadanía, para que los inmigrantes indocumentados puedan salir de las sombras y tener una oportunidad de volverse ciudadanos americanos”, dijo Monseñor Gómez. “Da esperanza a millones de seres humanos”, agregó.
El Arzobispo Gómez hizo notar que el marco de trabajo deja espacio para hacer mejoras, ya que deja por fuera la restauración de protecciones que inmigrantes perdieron a raíz del Illegal Immigration Reform and Immigrant Responsibility Act (IIRIRA) de 1996, o abordar las causas de la migración como la ausencia de salarios mínimos en países con altos índices de migración o protecciones para refugiados que huyen de persecuciones.
Monseñor también ofreció apoyo de USCCB en impulsar un proyecto de ley de inmigración sensato y trabajar con el Congreso para crear un sistema migratorio que respete la dignidad y los derechos humanos básicos y a la vez proteja la integridad de nuestras fronteras.
“Un sistema reformado puede proteger la dignidad humana y la patria a la misma vez”, dijo.
En su carta pastoral del 2003, “Ya no somos extranjeros: Juntos en el Camino de la Esperanza,” la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB) describió varias metas sobre una reforma migratoria que son consistentes con el marco de trabajo presentado hoy por el Senado:
Un camino a la ciudadanía para los 11 millones de indocumentados en el país;
La protección y mejoramiento de un sistema migratorio basado en la familia, incluyendo la reducción de solicitudes pendientes y recortar el tiempo de espera para esposos y esposas y sus familias,
Un programa que permita a trabajadores inmigrantes con pocas habilidades entrar y trabajar en los Estados Unidos legalmente y de manera segura e incluye protecciones apropiadas para trabajadores y sus salarios.
La restauración de protecciones para inmigrantes removidas por el Illegal Immigrant Responsibility Act de 1996 y
Leyes que aborden las causas de la migración como la ausencia de salarios mínimos y persecuciones.
Más información puede encontrarse en: www.justiceforimmigrants.org.